Grupo pequeño de células madre nerviosas que se cultiva en el laboratorio. Es posible cultivar neuroesferas similares al tejido nervioso normal de los seres humanos o a un tipo específico de tumor. Se usan para estudiar cómo se forma el tejido nervioso y ciertas enfermedades del sistema nervioso, como la enfermedad de Parkinson o los tumores de encéfalo. Las neuroesferas también se usan para probar nuevos tratamientos antes de administrarlos a las personas.